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Los tres retos que enfrenta el e-commerce en México para crecer

De acuerdo a la Asociación de Internt en México, el e-commerce creece por año dos dígitos, alcanzando ventas por 300 millones de pesos, un 52% más que en 2015. Todo apunta que la tendencia seguirá de esta forma año tras año, hasta alcanzar en 2020 ventas por encima de los 500 millones de pesos. Suena alentador. Sin embargo es una cifra baja cuando la comparamos con las ventas en tiendas físicas.

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De acuerdo a la Asociación de Internt en México, el e-commerce creece por año dos dígitos, alcanzando ventas por 300 millones de pesos, un 52% más que en 2015. Todo apunta que la tendencia seguirá de esta forma año tras año, hasta alcanzar en 2020 ventas por encima de los 500 millones de pesos. Suena alentador. Sin embargo es una cifra baja cuando la comparamos con las ventas en tiendas físicas.

En México nos falta alcanzar el potencial necesario para que el e-commerce pueda crecer aún más y ser competitivo en relación con otros mercados. Hay que tomar en cuenta que si dentro del nuevo Trado de Libre Comercio (TLC) se incluye que el e-commerce de EEUU puede penetrar a México con o sin impuestos, afectaría el crecimiento local si no estamos preparados para competir contra los sitios americanos o canadienes.

El objetivo para superar esta brecha es que cada vez más gente compre en línea. México es un mercado grande y los números pueden parecer impactantes, pero la realidad es que el e-commerce actualmente no llega al 2% del total de las ventas en el sector retail.

El e-commerce actualmente no llega al 2% del total de las ventas en el sector retail.

Falta de confianza

De acuerdo al más reciente estudio hecho por Nielsen, en 2016, el 67% de los internautas mexicanos tienen serias dudas acerca de la seguridad de sus datos al comprar online.

Hace falta dar a entender a la población o al consumidor que sus datos están protegidos, que están cifrados por medio de tecnología encriptada, y que deben utilizar sitios que tengan el parámetro https. Todavía en México la gente no entiende que es más difícil que le roben su información en línea que entregando su tarjeta de crédito en una gasolinera o restaurante. Por eso las asociaciones mexicanas, como los sitios de e-commerce, deberán emprender una campaña de generación de confianza hacia usuario.

Baja bancarización

Este es un problema serio en México ya que, de acuerdo a la Asociación de Bancos en México, sólo el 43% de los mexicanos con capacidad de compra tienen una cuenta bancaria o una tarjeta de crédito. Si la industria no logra crecer el número de tarjetas de crédito entre la población, será aún más lento el crecimiento del e-commerce.

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Soluciones de algunos sitios han sido usar las tiendas de auto servicio para facilitar el pago a los clientes. Esto permite a los consumidores ir a tiendas cercanas, como MercadoPago, Oxxo, Walmart, a realizar sus pagos posteriores a una compra en línea. Son opciones físicas para pagar sin necesidad de tener una cuenta de banco o tarjeta de crédito. No se nos olvide, además, el pago al recibo de la mercancía en casa.

Otro problema que se han encontrado los usuarios es que a veces las transacciones que hacen con sus tarjetas de crédito o de débito son rechazadas por los bancos por temas de seguridad. Ante esto, ya varios grandes retailers han acordado con los bancos asumir el riesgo de estas transacciones a pesar de los altos costos en que pueden incurrir los sitios. Sin embargo es una forma de asegurar la venta.

Se trata de medidas que alivian momentáneamente la situación, pero a mediano y largo plazo, los bancos deberán mejorar sustancialmente sus procesos de autorización de estos pagos.

Los bancos deberán mejorar sustancialmente sus procesos de autorización de estos pagos.

Falta de visión del e-commerce como negocio

Nos hemos encontrado que, aunque no todos, varios retailers aún ven al e-commerce como su competencia. Esto es lo que provoca la falta de precios más bajos, o promociones que pueden ser más atractivas a los usuarios, para atraer mayores ventas al mediano plazo.

Varios retailers aún ven al e-commerce como su competencia.

Si en México logramos que las personas que operan el e-commerce tengan la visión de que son un brazo más del negocio principal, y que pueden vender aún más con mejores promociones, y no sólo con el típico meses sin intereses, estoy seguro de que la industria del e-commerce crecería hasta en 3 dígitos anuales.

Fuentes: Nielsen reporte 2016, y Asociación Mexicana de Internet

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